SANTÍSIMO SACRAMENTO
domingo, 23 de septiembre de 2007
ORAR PARA NO ENTRAR EN TENTACIÓN.
Digamos con toda humildad:
1) Con San Pedro te decimos: "Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te amo".
2) Con la Samaritana te decimos: "Dame esa agua que salta hasta la vida eterna".
3) Con Santo Tomás te invocamos: "Señor mío y Dios mío".
4) Con la mujer Cananea acudimos diciendo: "Señor, ayúdame".
5) Y con Pedro en el lago: "Aparta de mí, Señor, que soy un gran pecador".
6) Con los dos leprosos de Samaria te suplicamos: "Jesús, hijo de David, ten compasión de nosotros".
7) Y con los discípulos en la tempestad: "Señor, sálvanos que perecemos".
8) Y con Pedro en la montaña: "¿A dónde iremos?. Tú tienes palabras de vida eterna".
9) Con el Buen Ladrón te decimos: "Acuérdate de mí, cuando estés en tu Reino".
10) Y con el Centurión: "¡Verdaderamente éste era el Hijo de Dios!".
Publicado por
Mª Mercedes Ramos Martínez mrjesusenticonfio@gmail.com
en
domingo, septiembre 23, 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
VÍA CRUCIS VIRTUAL
DEVOCIÓN A LA DIVINA MISERICORDIA
JESUS EN TI CONFIO
SANTÍSIMO SACRAMENTO TE ADORAMOS, TE BENDECIMOS Y TE GLORIFICAMOS.
SANTISIMO SACRAMENTO
HIMNO A JESÚS SACRAMENTADOPOR SANTO TOMÁS DE AQUINO(Adoro te devote)
Te adoro con devoción, Dios escondido, oculto verdaderamente bajo estas apariencias. A Ti se somete mi corazón por completo, y se rinde totalmente al contemplarte. Al juzgar de Ti, se equivocan la vista, el tacto, el gusto; pero basta el oído para creer con firmeza; creo todo lo que ha dicho el Hijo de Dios: nada es más verdadero que esta palabra de verdad. En la Cruz se escondía sólo la Divinidad, pero aquí se esconde también la Humanidad; creo y confieso ambas cosas, y pido lo que pidió aquel ladrón arrepentido. No veo las llagas como las vio Tomas pero confieso que eres mi Dios: haz que yo crea más y más en Ti, que en Ti espere y que te ame. ¡Oh memorial de la muerte del Señor! Pan vivo que das vida al hombre: concede a mi alma que de Ti viva y que siempre saboree tu dulzura. Señor Jesús, bondadoso Pelícano, límpiame a mí, inmundo, con tu Sangre, de la que una sola gota puede liberar de todos los crímenes al mundo entero. Jesús, a quien ahora veo oculto, te ruego que se cumpla lo que tanto ansío: que al mirar tu rostro cara a cara, sea yo feliz viendo tu gloria. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario